Página principal




Info

Obra de un artista que no solo persigue producir belleza, existen otras aptitudes testimoniales que han caracterizado a la lucha política como manipulaciones del objeto artístico a fin de dar publicidad a una idea, promover un grupo o status personal, actúa como un intelectual a partir del análisis de un territorio que pretende controlar o cambiar. Abdell pretende controlar el territorio histórico imaginario que muchas veces se ocupa pero pocas se ama, utiliza un lenguaje literario y social.

Estas esculturas desdibujan la propia cultura, en este caso la cultura Fenicia, revolucionaria bajo esa apariencia arqueológica, objeto de lujo, es una obra pedagógica con unas referencias históricas muy precisas tanto del artista como del entorno. El uso de códigos inspirados en remotas culturas y su transcripción a materiales duros, metal y piedra es una referencia más de la distancia y la crisis de una sociedad hostil y refractaria al trabajo artístico, las acciones y libertad conforman la estrategia artística que conforman y motivan la obra actual de Abdell.

Las esculturas de Abdell a pesar de sus referencias cultas, remotas y arqueológicas, se nos proponen innovadoras a las corrientes artísticas conservadoras que ya se han instalado muy bien en la Administración Pública, ahora alejada y crítica con la experimentación y el arte contemporáneo se admira esta obra como un producto histórico por su belleza momentánea y por la sencillez de elementos, sin olvidar la plenitud de conceptos.

Texto extraído del crítico de arte Joan Abelló.